-Lo que tú digas, Jane. Simplemente tienes fascinación por mí. Pero tranquila, nunca pienso sobrepasar las distancias-Le dice de forma provocativa. La mira de nuevo.
-Pero , algún día me rogarás. Ese día, te habrás conocido a ti misma-Le anuncia como si fuese una profeta. Sabía que ella no solía equivocarse en estas cosas-Te engañas mucho a ti misma. Quieres ser lo que de verdad odias-Le dice antes de marcharse. Ane, siempre tenía esa mala costumbre.